Neuroma de Morton - Clínica San Román

Tratamiento del Neuroma de Morton

El neuroma de Morton es una afección dolorosa que afecta el nervio digital plantar común, generalmente en el tercer y cuarto espacio intermetatarsiano. Se caracteriza por una sensación de dolor agudo, quemazón o calambre que puede irradiarse hacia los dedos del pie. A continuación, se presenta una descripción detallada del neuroma de Morton, su etiología, manifestaciones clínicas, diagnósticos y una revisión exhaustiva de los tratamientos posibles.

Características
Manifestaciones

Características y origen

- Etiopatogenia
- El neuroma de Morton es una neuropatía por compresión que ocurre cuando el nervio digital plantar común se irrita y engrosa debido a la presión entre los huesos metatarsianos. Esta compresión puede estar asociada a varios factores:
- Anatomía del pie: Un pie plano o un antepié pronado pueden predisponer a una mayor presión en el nervio.
- Calzado inapropiado: Zapatos de tacón alto o estrechos que comprimen el antepié.
- Trauma repetitivo: Actividades que implican una presión constante en el antepié, como correr o saltar.

Manifestaciones clínicas

Los síntomas típicos incluyen:

- Dolor agudo: Especialmente al caminar o al usar ciertos tipos de calzado.
- Parestesias: Sensación de hormigueo o adormecimiento en los dedos.
- Calambres: Dolor tipo calambre que se irradia a los espacios interdigitales.
- Signo de Mulder: Dolor y un chasquido palpable al comprimir el espacio intermetatarsiano afectado.
- DiagnósticoEl diagnóstico se basa en la historia clínica y la exploración física. Las pruebas complementarias incluyen:
- Radiografías: Para descartar otras causas de dolor metatarsiano.
- Resonancia Magnética (RM) y Ecografía: Para visualizar el engrosamiento del nervio y descartar otras masas.
- Electromiografía: Aunque es menos común, puede ayudar a confirmar el diagnóstico evaluando la conducción nerviosa.

Tratamientos para el Neuroma de Morton

El neuroma de Morton es una afección tratable con una combinación de medidas conservadoras y, en casos resistentes, intervenciones quirúrgicas. La elección del tratamiento depende de la severidad de los síntomas, la respuesta a las terapias iniciales y las características individuales del paciente. Es fundamental una evaluación exhaustiva y un enfoque multidisciplinario para lograr los mejores resultados clínico.

1. Medidas Higiénico-Posturales:
- Calzado adecuado: Uso de zapatos anchos y planos.
- Ortesis: Plantillas personalizadas para redistribuir la presión en el pie.
2. Medicamentos:
- Analgésicos y Antiinflamatorios: Para controlar el dolor y la inflamación.
- Infiltraciones: Inyecciones de corticosteroides y anestésicos locales para reducir la inflamación y aliviar el dolor.
3. Fisioterapia:
- Ejercicios de estiramiento: Para aliviar la presión en el nervio.
- Masajes y Terapias Manuales: Para reducir la tensión en el tejido blando.

Tratamientos quirúrgicos

Cuando los tratamientos conservadores fallan, se consideran las opciones quirúrgicas:
1. Neurólisis:
- Liberación del Ligamento Intermetatarsiano Transverso: Este procedimiento alivia la presión sobre el nervio sin extirparlo.
2. Neurectomía:
- Extirpación del Nervio Afectado: Indicada en casos severos o recurrentes. Implica la eliminación del segmento nervioso engrosado.
3. Osteotomías:
- Osteotomías de Metatarsianos: Realizadas en combinación con la liberación del ligamento para modificar la posición del metatarsiano y reducir la compresión en el nervio.

Postoperatorio

Después de la cirugía, se deben seguir cuidados específicos para garantizar una recuperación adecuada:
- Vendaje y calzado posquirúrgico: Para proteger el pie y permitir una correcta cicatrización.
- Rehabilitación: Fisioterapia para recuperar la función del pie y evitar complicaciones.
- Seguimiento clínico y radiológico: Para asegurar la correcta consolidación y recuperación.