HALLUX RIGIDUS ¿Qué es?

10 de julio de 2024

El hallux rigidus es una afección degenerativa que afecta la articulación metatarsofalángica del dedo gordo del pie, impidiendo su movimiento normal. Esta condición es una forma de osteoartritis y suele presentar síntomas como dolor, rigidez y limitación del movimiento. A continuación, exploramos en detalle qué es el hallux rigidus, sus causas, síntomas, diagnóstico y opciones de tratamiento.

¿Qué es el Hallux Rigidus?

El término «hallux» se refiere al dedo gordo del pie, y «rigidus» indica rigidez. Por lo tanto, el hallux rigidus se caracteriza por la rigidez y el dolor en la articulación del dedo gordo, especialmente durante el movimiento. Es una forma de artritis que resulta en la degeneración del cartílago articular, causando fricción entre los huesos y, en última instancia, la pérdida de movilidad.

Causas del Hallux Rigidus

Las causas del hallux rigidus pueden variar, pero generalmente incluyen:

  • Genética: Una predisposición genética puede aumentar el riesgo de desarrollar hallux rigidus.
  • Trauma: Lesiones en el dedo gordo, como fracturas o esguinces repetitivos, pueden llevar al desarrollo de esta condición.
  • Deformidades estructurales: Arcos altos, pies planos o una alineación anormal del dedo gordo pueden contribuir al desgaste articular.
  • Actividades repetitivas: Deportes o trabajos que implican movimientos repetitivos del dedo gordo pueden acelerar el desgaste de la articulación.

Síntomas

 

Hallux Rigidus ilustración

Los síntomas del hallux rigidus pueden incluir:

  • Dolor y rigidez: Especialmente al caminar, correr o estar de pie durante largos períodos.
  • Inflamación y sensibilidad: En la articulación afectada.
  • Movilidad limitada: Dificultad para mover el dedo gordo hacia arriba y hacia abajo.
  • Desarrollo de espolones óseos: Crecimientos óseos que pueden aparecer en la parte superior de la articulación del dedo gordo.
  • Cambios en la marcha: Debido al dolor, las personas pueden modificar su forma de caminar, lo que puede llevar a problemas en otras áreas del pie, tobillos, rodillas o caderas.

Diagnóstico

El diagnóstico del hallux rigidus se realiza a través de:

  • Examen físico: Un podólogo evaluará el rango de movimiento del dedo gordo y buscará signos de hinchazón, sensibilidad y crecimientos óseos.
  • Radiografías: Para visualizar el grado de degeneración articular y la presencia de espolones óseos.

Opciones de Tratamiento

El tratamiento del hallux rigidus puede ser conservador o quirúrgico, dependiendo de la gravedad de los síntomas y la progresión de la enfermedad.

Tratamientos Conservadores

  • Medicamentos: Antiinflamatorios no esteroides (AINEs) para reducir el dolor y la inflamación.
  • Calzado adecuado: Uso de zapatos con suelas rígidas y espacio amplio para los dedos.
  • Ortesis: Plantillas personalizadas que redistribuyen la presión y alivian el estrés en la articulación.
  • Terapia física: Ejercicios de estiramiento y fortalecimiento para mejorar la movilidad y reducir el dolor.

Tratamientos Quirúrgicos

Si los tratamientos conservadores no son efectivos, pueden considerarse opciones quirúrgicas, tales como:

  • Quilotomía: Eliminación de espolones óseos para mejorar el movimiento articular.
  • Artrodesis: Fusión de la articulación del dedo gordo para eliminar el dolor.
  • Artroplastia: Reemplazo de la articulación dañada con una prótesis.

Prevención

Aunque no siempre es posible prevenir el hallux rigidus, ciertas medidas pueden reducir el riesgo de desarrollar esta condición:

  • Uso de calzado adecuado: Zapatos que proporcionen soporte y espacio suficiente para los dedos.
  • Evitar lesiones: Protección del pie durante actividades deportivas.
  • Control de peso: Mantener un peso saludable para reducir la presión en las articulaciones del pie.

Conclusión

El hallux rigidus es una condición dolorosa y debilitante que puede afectar significativamente la calidad de vida. Sin embargo, con un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado, es posible manejar los síntomas y mejorar la función del pie. Si experimentas dolor o rigidez en el dedo gordo del pie, es fundamental consultar a un especialista en podología para recibir una evaluación y tratamiento adecuado.

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